LACTIC ACID

Qué es: El ácido láctico lo encontramos en cualquier producto lácteo en fermentación: leche, queso, kéfir... 

Para qué sirve: Se suele utilizar en concentraciones pequeñas sobre todo en los sérums y cremas faciales por sus beneficios para la piel. Actúa tanto en la superficie como en la capa más profunda de la piel, en la que ayuda a estimular la producción de colágeno y elastina, manteniendo la elasticidad. Es decir, que actúa como un potente antiaging ya que ayuda a prevenir y estirar las arrugas. Además, ayuda a mantener las ceramidas y los lípidos de la piel, agentes que precisamente mantienen una buena hidratación. Actúa como un exfoliante, potenciando el ciclo de regeneración de la piel y regenerando la que ha sido afectada por el sol. Sus propiedades a la hora de reparar y actuar reteniendo la hidratación lo convierten en muy recomendable para pieles secas y dañadas.